PEQUE GUARA EN FAMILIA
23/11/2014
RUTA Nº 9
PICO PEIRÓ – EMBALSE ARGUIS
Un domingo más, una nueva excursión de la sección de Peque Guara, en esta ocasión ha sido un lugar cercano nuestro destino, el Pico Peiró, en la Sierra de Gratal.
Ya llevamos unas cuantas excursiones con los “peques” y vamos a intentar lo que será el primer pico para alguno de ellos. El día amanece gris, pero estamos todos cargados de ganas e ilusión. El autobús nos deja en el inicio de la pista que rodea el embalse de Arguis, en la carretera que se dirige a Bentué de Rasal y tras la foto de grupo, los niños empiezan la excursión corriendo por la pista. Este primer tramo es fácil, todavía no hay pendiente y todos tenemos las energías intactas.
Cuando llegamos al cartel que nos indica la subida al pico, realizamos una parada y tomamos un ligero almuerzo para coger fuerzas, que harán buena falta. Ahora todos los pequeños se colocan en la cabeza del grupo, queremos que sean ellos los que marquen el ritmo porque el primer tramo de subida entre el bosque es duro, con bastante pendiente. No tardamos en darnos cuenta que los peques están fuertes, llevan un buen ritmo en la subida y no escuchamos quejas por esta ascensión. El camino discurre primero entre pinos salpicados de bojes, para posteriormente ver que son hayas las que nos acompañan la subida, tejos, algún acebo. Aunque el día no nos proporciona mucha luz, todavía contemplamos los variados colores que nos proporciona el otoño, la alfombra de hojas caídas, muchos árboles ya desnudos y otros con las últimas hojas coloreadas a punto de caer.
Pronto llegamos a una zona con barandillas que sirven de mirador para contemplar la sierra que tenemos en frente y ya empezamos a ver la cima del pico que ascenderemos. Ahora el camino discurre íntegramente por el hayedo, unos escalones de madera servirán de improvisada tribuna para un breve descanso. Aunque el camino continúa ascendiendo, la pendiente no nos resta ánimos.
El espeso bosque da paso ahora a una zona de monte bajo cubierto de bojes y erizones. El mal tiempo ahora amenaza con mojarnos antes de llegar a la cima y cuando llegamos al collado a los pies del pico, el aire nos obliga a abrigarnos un poco, apenas nos quedan unos minutos para alcanzar la cima, así que con decisión encaramos los últimos metros enfrentándonos al viento que cada vez más fuerte azota nuestras caras. Ya en la cresta del pico, a pesar de que el aire quiere evitarlo, la mayoría nos acercamos hasta el pequeño montón de piedras que nos indica que hemos cumplido el objetivo. Contemplamos la inconfundible silueta del cercano Gratal. Apenas unas fotos en la estrecha cima y la lluvia nos obliga a iniciar la bajada. La idea de comer en el collado, contemplando el valle de Bentué de Rasal, no puede ser, hoy no es el lugar más indicado, así que bajamos por el camino que hemos subido poco tiempo antes hasta llegar de nuevo al hayedo, protegidos del viento, en una zona amplia dónde comemos, aunque la lluvia intermitente nos obliga pronto a ponernos en marcha de nuevo. La bajada aunque rápida, la hacemos con precaución, ya que la suma del suelo mojado y una fuerte pendiente hace que más de uno se siente involuntariamente en el suelo, sin mayores consecuencias que un poco de barro en la ropa.
Cuando el camino nos deja en la pista, la lluvia hace que tomemos la decisión de no ir hasta la presa de Arguis, dónde estaba previsto que nos recogiera el autobús y volvemos al punto de partida por el mismo camino que hemos recorrido unas horas antes hasta el punto de inicio de la excursión de este domingo.
A pesar de que el tiempo no ha terminado de acompañarnos, ha sido un día magnífico, todos los niños y niñas están contentos de haber subido al pico y cuando el autobús nos deja de nuevo en Huesca, continúan corriendo. Ha sido otra jornada de convivencia familiar en la montaña con la familia de Peque Guara, que satisfechos por el día nos despedimos hasta la próxima.
J.L.
