Caminando por el monte de Bonés
El grupo comenzó el curso con una circular por la zona de Las Tiñas y La Magdalena
P. A.
Mañana de saludos por el reencuentro del grupo de “Rutas” tras las jornadas festivas. A las 8 de la mañana, con una temperatura fresca, los 45 caminantes montaban en el autobús, guiado por Fernando, para recorrer los pocos kilómetros que separan la capital de la localidad de Arguis. En media hora el autobús aparcaba en un ensanchamiento existente en la carretera vieja que se dirige al túnel de La Manzanera, poco después de pasar el núcleo urbano y dejar a la izquierda el desvío que se dirige a Bentué de Rasal.
Hay que descender unos metros por la carretera para tomar una senda trazada en la solana, aunque a estas horas de la mañana al sol le cuesta hacerse hueco entre las nubes. Ascendemos unos cientos de metros y aparece una señal que indica hacia la izquierda la dirección hacia la zona de la “Ralla d’as Tiñas” y hacia la derecha la ermita de “La Malena”. El grupo se lo toma con tranquilidad y sube lentamente porque la pendiente es moderada y larga.
En unos veinte minutos llegamos a lo alto del cantil y pasamos al lado de varias casetas que hace años que dejaron de tener actividad. Una pena pues son unas construcciones de piedra muy bien edificadas y sería deseable que se encontraran en mejores condiciones, al menos podrían servir como refugio en momentos determinados.
El desnivel se suaviza y el camino ofrece una bonita panorámica del pantano de Arguis y las sierras que la circundan. Llegamos más tarde a una gran explanada donde contemplamos en la lejanía el monte de San Juan de la Peña y al fondo las cumbres del Pirineo con una alarmante carencia de nieve. Nos encontramos en el collado de Marallón, un sitio abierto y adecuado para reponer fuerzas. Perdemos un buen rato que aprovechamos también para disfrutar de un espectacular paisaje desde lo alto del cortado que nos permite distinguir las cercanas cimas del Peiro y Gratal. Conocemos algo sobre las “tiñas”, que eran zonas cerradas utilizadas para recoger el ganado en tiempos pretéritos.
Reanudamos la marcha por un llano cubierto de boj y erizones pero con una senda limpia y cuidada; son las últimas rampas de la mañana, un poco más de ascensión y llegamos a un roquedo que es la zona más elevada de la excursión tras salvar un desnivel de 515 metros. Una foto de grupo y empezamos un largo descenso por el bosque de pinos, bojes y artos hasta alcanzar la pista que bordea toda la sierra de Bonés.
Llegamos a unos corrales, por una senda alcanzamos la ermita de “La Malena” (Magdalena), rehabilitada recientemente. Vamos bien de tiempo y nos acercamos a la zona de las fuentes que se consideran el nacimiento del río Flumen, aunque la naciente se encuentra aguas arriba.
Regreso a la ermita y de allí a la pista por donde andamos unos metros para coger un desvío perfectamente señalizado y caminar un buen trecho por un precioso bosque de pinos, hayas y bojes hasta alcanzar un pequeño collado con excelentes vistas del valle de Belsué y de la sierra de Gabardiella. Desde aquí hay un largo descenso de una hora por senda hasta alcanzar el lugar del comienzo de la marcha.
Allí nos espera el autobús para trasladarnos al restaurante Barbacana, de Arguis, donde Mauricio y sus compañeras de equipo nos esperan con un gustoso menú. Un rato de sobremesa y a las 5 regreso a Huesca. Ahora a esperar la próxima salida; nos acercaremos al Sobrarbe para caminar por tierras de Hospitalet y Almazorre. Recordar que la sección de Turismo por el Altoaragón comienza las andadas el próximo domingo con una travesía de Bárcabo a Olsón.