Un día soleado para disfrutar de un tranquilo paseo
P. A.
Una nueva salida de la seccion de Peña Guara “Rutas por la Provincia”. El pasado año, el grupo recorrió el primer tramo desde Somport a Villanúa, y decidió entonces que para este curso retomaríamos el Camino de Santiago para concluir en Jaca.
El pasado domingo 60 senderistas emprendíamos el viaje y en apenas hora y media el autobús, guiado por el amigo Diego, aparcaba en la parte alta de Villanúa (935 m.s.n.m.), donde concluyó la excursión antes mencionada. Las predicciones daban algo de lluvia, pero ya a lo largo del viaje podíamos comprobar que las aguas habían caído a lo largo de la noche y teníamos un cielo completamente soleado con una temperatura ideal para caminar.
Unos minutos para prepararnos y en marcha. Desde este punto de inicio se plantean dos alternativas para llegar a Castiello. Nosotros tomamos el GR-65.3.1 que sin ser el histórico es más agradecido pues va alejado de la carretera. Este ramal y el GR-65.3 conforman un recorrido circular entre Villanúa y Castiello para realizar una excursión de una jornada.
Cruzamos por las bonitas calles de Villanúa y tomamos una pista asfaltada en dirección sur entre campos de cultivo, pasando al lado del cementerio nuevo y observando al norte las cumbres cubiertas con las primeras nieves. Por una pista de tierra entre una zona boscosa poblada de pinos y robles vamos avanzando, disfrutando de las nieblas que se levantan sobre el cauce del río Aragón. Al poco observamos el “tren canfranero” a la derecha; está llegando a la zona donde tiene que hacer una gran revuelta con la finalidad de ganar altura. Una gran obra de ingeniería en la época de su construcción.
Al poco nos detenemos a tomar el bocadillo, aprovechando una zona soleada con vistas al valle y desde donde se distingue claramente al sur la figura de Peña Oroel. El entorno del río aún conserva los bonitos colores del otoño.
De nuevo en marcha y, al poco, observamos un desvío; el de la izquierda, PR-12, se dirige a la interesantísima ermita de Santa María de Iguácel y continúa hasta llegar a Acumuer, en el Serrablo. El camino que seguimos nosotros gira bruscamente a la derecha por un pronunciado descenso, se cruza más adelante el barranco de San Juan y por una zona sombría y húmeda llegamos al puente que salva el río Aragón y otro que pasa por encima de las vías del ferrocarril, cercano a la carretera N-330. Cruzamos con cuidado y nos detenemos unos minutos en Castiello (921 m.) visitando, gracias a la amabilidad de unas vecinas, la bonita iglesia de raíces románicas dedicada a San Miguel.
Hay que descender de nuevo, cruzar la carretera y pasar un puente sobre el río Aragón, para coger a la derecha un camino donde vemos unos hermosos ejemplares de nogales; al poco, andando por la orilla del cauce tenemos que franquear el río Ijuez por una moderna pasarela. Seguimos por la pista hasta cruzar la carretera por debajo del puente de la carretera nacional y llegar al poco a la ermita de San Cristóbal, situada en un hermoso y tranquilo lugar, con abundante agua y vegetación.
Pasando por un bonito puente románico que se encuentra al lado de la ermita nos encaminamos al final de la excursión. Al fondo se ven los edificios de Jaca (818 m) a donde llegamos tras unas 4 horas de caminata. Pensamos que el mejor recuerdo de un día magnífico es plasmarlo en una fotografía de grupo en la conocida Ciudadela.
En pocos minutos con el autobús nos desplazamos a Sabiñánigo. Ya nos espera el equipo de Virginia con el menú preparado en el restaurante del Hotel Villa Virginia.
El próximo mes concluyen las actividades anuales de las secciones senderistas de “Rutas por la Provincia” y “Turismo por el Altoaragón”. Para ello, ambos grupos despedirán el año caminando por el entorno del Salto del Roldán, conociendo la historia de los pozos de nieve de la zona y ascendiendo al Pico del Aguila, como itinerario alternativo. Recordar, por último, que los amigos de Turismo han preparado para el próximo domingo una interesante travesía: Casa Estebañón – Ermita de Arraro – Santa Cilia de Panzano.