El Perdiguero por la cresta de Gargallosa
Pico a Pico otoñal
El Perdiguero es una gran montaña, que impone su presencia desde la misma entrada por el valle de Literola, por donde discurre el itinerario de acceso más normal y frecuentado. El Aneto, El Posets, el mismo Monte Perdido, a los que sigue en altitud, por sus vías normales ocultan su presencia hasta que se alcanzan cotas altas del itinerario, pero el Perdiguero por ese valle muestra su magnífica presencia. Como ya se ha ascendido en otras ocasiones por Literola, para esta vuelta otoñal de la Pico a Pico hemos elegido una ruta original, fuera de senderos, por una bonita cresta, la de Gargallosa por el Sur, desde el valle de Estós.
El refugio de Estós es el punto de partida, y el valle con un final de estío seco se muestra menos verde que de costumbre, aunque la humedad de la noche mantiene los prados de montaña. El domingo, los 21 participantes, antes de amanecer, tomamos el camino del barranco de Gías, por el que se va al puerto de Oo y los Clarabides, cruzamos el barranco a la margen izquierda para desviarnos hacia el primer hito del camino en el collado de Molseret. El trayecto discurre por debajo de las paredes de la cresta del Seil de la Baquo, con sus grandes vetas rocosas de diferentes materiales que le dan un aspecto peculiar rojizo y grisáceo. Sin perder ni ganar altura, manteniéndonos aproximadamente por la curva de nivel de 2.500 metros se van traspasando barranqueras y roquedos por prados sin sendero definido hasta alcanzar la brecha en una primera cresta de la vertiente, el collado Molseret es más bien un paso donde hacemos un primer descanso. El sol nos dá de frente, vamos al Este retrocediendo por la parte alta lo que ayer anduvimos por la parte baja del valle, y casi no deja ver el trayecto de sube y baja por el valle de Molseret, hasta toparnos prácticamente con una corta canal que nos deposita en el collado de Gargallosa, entre las Tucas recortadas de la cresta y la continuidad de la misma hacia el Perdiguero al que apuntala por el Sur.
El reagrupamiento para afrontar este tramo más técnico en el collado nos sirve para seguir identificando las cumbres y crestas del macizo del Posets por la vertiente de Estós que se muestra espectacular desde este punto de vista, desde el puerto de Gistaín hasta el collado de la Paul, con los Gemelos que se subieron con la Pico a Pico hace alguna temporada, la cresta de Bardamina, el Montidiego, la cuenca de la Paul que albergaba un glaciar.
Iniciamos la trepada de la cresta desde la brecha de Gargallosa, se suceden pasos de I y II grado, no es difícil pero es una cresta a ratos recortada y con pasos aéreos sobre los cortados de la pared Sur del macizo, que requieren manejarse en ese terreno. Vamos reagrupando para recorrer la loma cimera pedregosa y fácil. Enlazamos con otros montañeros que suben por el valle de Literola en la cresta cimera que va del Hito Oriental a la cumbre, que sirve para comprender la dimensión de macizo que tiene el Perdiguero. La cumbre oriental es un auténtico punto de encuentro para la fotografía de lo que se abre a nuestros pies, el azulísimo lago superior de Literola, y las crestas que van del Crabioules al Maupas y al Boum, picos que también se han ascendido con la Pico a Pico. El lago de Oo, el refugio Jean Arlaud y el Lezat y el Quayrat que se distinguen mejor por separado desde la cumbre del Hito Occidental, al que algunos se han aproximado también. Los restos del glaciar al Norte del macizo de Seil de la Baquo, que hemos traspasado por debajo al otro lado, confieren un aspecto duro a esta vertiente que se suaviza con la vista de los lagos del valle de Oo y el de Literola.
En la cumbre nos reunimos, nos fotografiamos, reponemos fuerzas, e iniciamos el descenso por la vía normal del valle de Literola para lo que hay que dirigirse de nuevo por la cresta cimera al Sureste en dirección al collado Ubago. Mucho antes del largo descenso por ese collado, por el campo de bloques de grisáceo granito alcanzamos el desagüe del lago superior de Literola. Las nubes que durante un rato en la cumbre estaban amenazantes han dejado una tarde soleada para el largo trayecto desde los 3.222 metros de la cumbre del Perdiguero hasta el puente de Literola donde nos espera el autobús. El barranco se encajona en buena parte que hay que ir salvando por las paredes rocosas. Un respiro en el ibón inferior al pie del Perdigueret para los 800 metros de descenso que restan por un terreno menos rocoso que al final entra en el bosque. Celebramos la travesía como siempre en torno a unas buenas bebidas y esperamos que la ascensión de Gargallosa al Perdiguero y el descenso por el valle de Literola que nos ha llevado unas 11 horas y más de 1.600 metros de desnivel superado, haya servido a las nuevas participantes para disfrutar del recorrido y tomar conciencia de la dimensión de los grandes macizos del Pirineo central del valle de Benasque, como el del Posets y también el del Aneto que por la vertiente de Cregüeña se observa durante buena parte del descenso.
13-09-2016
Lola Mas
