17 septiembre 2023
Por Aigualluts y el ibón de Toro
El pasado domingo día 17 volvimos al valle de Benasque. Hay que aprovechar los periodos en que está abierta la carretera. Las previsiones meteorológicas eran inciertas pero contamos con buen equipamiento y sobre todo con mucha ilusión y por ello a las diez de la mañana empezábamos a caminar desde la Besurta, ya que gracias a la buena armonía entre Peña Guara y Avanza, el bus nos subió hasta allí.
Con sol y buena temperatura llegamos al primer ibón de Billamorta. La ascensión al segundo ibón es un duro repecho que nos tomamos con calma y parando para observar con alegría como las nubes, que en principio cubrían los altos picos, se iban retirando.
La panorámica desde el ibón alto de Billamorta es de portada de calendario. La tuca de la Renclusa nos deja ver a la derecha las Maladetas y su glaciar y a la izquierda el Aneto con el suyo y una decena de picos por encima de los tres mil metros desde Mulleres a Perdiguero. Junto al ibón nos detuvimos un buen rato a almorzar.
De forma suave y escalonada fuimos descendiendo entre pinos negros, pastizales y atravesando alguna que otra pedriza hasta el Foraú de Aigualluts. Conocer que el agua que se filtra por el espectacular sumidero sale al valle de Arán y que por el rio Garona y la ciudad francesa de Burdeos termina desembocando en el Atlántico produjo una enorme sorpresa entre los que no lo sabían. ¡¡ Paradojas de la Naturaleza: Parte del agua del Aneto al Océano Atlántico ¡¡.
La célebre foto de la Cascada y el Aneto de fondo no se pudo realizar pues el pico ya estaba envuelto por las nubes pero lo más preocupante eran los negros nubarrones que se acercaban por la zona de Barrancs. A buen paso atravesamos el Pllan de Aigualluts y tras cruzar el puente sobre el barranco emprendimos el duro repecho que da entrada al valle de la Escaleta.
Cruzando el bonito valle empezamos a notar algunas rachas de viento que se hicieron ya molestas donde la senda se bifurca para los que desean continuar hacia el pico Mulleres y el collado de los Aranesos, y que se convirtieron en violentísimas al cruzar el collado que acoge la cubeta donde nos esperaban las aguas azul turquesa del siempre deslumbrante ibón de Toro.
Iniciamos el camino de vuelta y las primeras gotitas de agua comenzaron a caernos por Aigualluts. Muy previsores, por conocedores y escarmentados en el tema, nos colocamos rápidamente capas, impermeables, etc. pero la cosa no fue a mayores y acompañados de una ligerísima llovizna llegamos hasta la Besurta. Comimos en el cubierto que hay junto al bar y todos dimos por muy buena la jornada senderista.
El recorrido de casi 11 km. y salvando un desnivel acumulado de 500 m. lo realizamos en un tiempo neto de 4 horas y cuarto.
Para el próximo domingo 24 de septiembre Turismo por el Alto Aragón nos ha preparado una travesía por el valle de Oza, desde Guarrinza a cruzar por los puertos del Palo y la Cunarda.