El Petrechema con esquís de montaña
Lola Mas
Segunda travesía promocional desde los llanos de Linza, en los valles Occidentales pirenaicos.
En la segunda mitad de Febrero se puede decir que hay abundante nieve en muchos valles, pero también que las condiciones meteorológicas que se están dado de altas temperaturas diurnas, con deshielo y rehielo nocturno, y los fuertes vientos que también se han producido, hacen que haya que pensar un poco más al decidir una ruta u otra, con la intención de acertar en el itinerario y en encontrar la mejor condición de nieve posible para la travesía de esquí de montaña.
El Petrechema de 2.371m. situado en el valle de Ansó es una buena elección ya que la buena nevada que cayó por fin a final de Enero dejó buenos espesores en los “dosmiles” de estos valles pirenaicos occidentales; lo que se puede ver por la carretera después de pasar por Zuriza que está encajada entre grandes amontonamientos de nieve hasta llegar al refugio de Linza. Precisamente por la “transitabilidad” se descartó una travesía por la zona de Oza en el valle de Hecho, ya que no hubiera sido posible aparcar los varios vehículos en los que nos desplazamos los veinte participantes de la travesía.
Desde los llanos de la estación de Esquí de Fondo a 1.135 metros, se inicia la travesía tomando el camino de la ruta normal, por donde suben también muchos montañeros a pie y otros esquiadores de montaña. El sol luce espléndido y aunque hemos leído en los pronósticos que en altura soplará viento, aún no se nota, aunque sí la nieve muy endurecida que tardará bastante en transformarse. Por esta ruta hay que llegar al collado de Linza a unos 1.937 metros de altitud, donde el pico Petrechema estará a la vista después de haber ascendido un buen rato sin verlo. A la vista está la pala somital del Mallo Acherito, que también es muy conocido por los esquiadores de montaña, y que si no se conoce podría confundirse con el Petrechema que está más allá. Ambos son picos que destacan puntiagudos en las grandes laderas que se atraviesan, en un relieve propio de los macizos calcáreos occidentales donde hay fajas colgadas sobre rellanos kársticos en los que destacan picos cortados por una de sus vertientes a pico y que por la otra parte o por la zona cimera ofrecen suaves lomas por las que ascender, como los que estamos viendo según vamos ascendiendo, al otro lado de los barrancos de nuestra derecha, como los del Chinebral de Gamueta, o los mallos de Gorreta.
En el camino del collado, después de un ascenso a media ladera donde por fin hay que poner cuchillas ya que la nieve está dura, se baja unos metros para volver a ascender trazando buenas zetas evitando las huellas pisadas de los montañeros a pie hasta un suave vallejo colgado, por donde se llega al collado de Linza. En ese punto de la ruta donde nos agrupamos, el anunciado viento hace su aparición de lleno, está a la vista el Petrechema y la ruta final de ascenso por un lomo que se alarga hasta la cima y que de lejos parece más pendiente de lo que luego es. También se puede ver su gran pala Sur, de fuerte inclinación, por la que se podría descender con buena nieve hacia el collado de Petrechema para continuar el descenso por el barranco de las Foyas del Ingeniero trazando una buena circular. Nos protegemos y continuamos con las cuchillas en los esquís por una larga media ladera a la base del pico. Allí la ventolera es muy fuerte, cambiamos a crampones para subir los 160 metros de desnivel que hay hasta la cumbre, en los que cuesta mantener el equilibrio con las fuertes rachas. Según el paso de cada uno nos vamos alternando en llegar a la cumbre, lo que viene bien ya que es una cumbre estrecha y alargada que no permite con tanto viento mucho movimiento. No se puede evitar admirar y hacer unas cuantas fotos del impresionante espectáculo desde la cima del Petrechema, también conocido por Ansabere, de las paredes de las Agujas de Ansabere que se ven desde este mirador, con el ambiente invernal de corredores de nieve y cornisas nevadas. Al Norte también hay que dar cuenta de la Mesa de los Tres Reyes que destaca como cumbre referente de la zona.
Nos volvemos a reunir en el rellano anterior a la loma cimera, donde hay que pelear para quitar crampones y pieles de foca y volver a ponerse los esquís, mientras se toma la decisión en medio de la ventolera de saltar a la vertiente Sur por un paso “de decisión” en la cornisa que se ha formado, por el que todos bajamos al ver que en la ladera la nieve está “salvavidas”, transformada y pararía un revolcón. Una vez salvada la salida, por fin algo protegidos del fuerte viento, Pedro entre otros se adelanta a ir trazando el mejor itinerario de descenso por el barranco de las Foyas del Ingeniero, que como ruta de descenso es mejor que volver por el mismo itinerario del collado de Linza, ya que es todo de bajada. Atrás se deja el collado de Petrechema, y por buena nieve casi primaveral se salvan las fuertes laderas de la vertiente derecha del barranco hasta llegar a una canal empinada, otro momento de decisión en el descenso, al que se anticipan de nuevo algunos, dando la salida a los demás, viendo que la nieve bien transformada permite el descenso de todos. Por fin, abajo, en la entrada de un bonito bosque de hayas nos tomamos un rato de merecido descanso después de los avatares del descenso en un día con tanto viento en las proximidades de las cumbres
El último tramo por la senda nevada que transita entre las ramas desnudas del bosque de hayas es un descanso para la vista, aunque esquivarlas también requiere no despistarse por los pasos estrechos, para alcanzar felizmente los llanos de Linza, comienzo y final de etapa. El desnivel que se ha sumado es de 1.135 metros positivos y 1.144 de descenso con el punto culminante a 2.371 metros del Petrechema, resultando un itinerario bastante largo en cuanto a recorrido que hemos podido hacer de forma circular, aunque la pala Sur del Petrechema haya quedado para otra ocasión con menos vientos. Y más que satisfechos por haber culminado un buen recorrido circular, bien resuelto a pesar del fuerte viento, lo celebramos en el trayecto de vuelta reuniéndonos de nuevo en Puente la Reina de Jaca.
19-02-2019 Huesca, Lola Mas
