10-XI-2013
RUTA Nº 159: Escalona – Muro de Bellós – Labuerda
Un paseo otoñal por el Sobrarbe
La salida 159 recorrió el antiguo camino entre Escalona y Labuerda pasando por Muro de Bellós
P. A.
La penúltima salida de la temporada de la sección Rutas por la Provincia de Peña Guara se acercó el pasado domingo a la comarca del Sobrarbe. A las 7’30, el grupo senderista, de 70 personas, se citó en la Estación Intermodal para subir a los autobuses guiados por Ezequiel y Ramón. Había incertidumbre con respecto al tiempo, pues las previsiones eran de lluvia y fuerte viento. No fue así, el grupo de caminantes disfrutó de un tiempo espléndido a lo largo del recorrido.
Después de pasar por Barbastro y Aínsa, llegamos a la localidad de Escalona; tras unos minutos para cargar las mochilas, emprendimos la marcha cogiendo la ruta que tras cruzar el puente sobre el río Bellós se empina rápidamente. La humedad se aprecia en la ladera cubierta de pinos orientada al Norte. Pasamos por un claro hasta llegar a una pista que se cruza varias veces. La senda, que conserva en diferentes tramos el piso empedrado original, era el camino que durante siglos se utilizó para el tránsito entre Escalona y Labuerda.
Al ganar altura la vista es magnífica, aunque las nubes que cubrían las altas cumbres del Pirineo apenas dejaron ver los altos picos. Sí observamos el impresionante Castillo Mayor, vigilando el entorno del Cañón de Añisclo y la siempre sorprendente Peña Montañesa. En una hora llegamos a Muro de Bellós, pueblo abandonado definitivamente en el año 2002 donde el paso del tiempo va dejando su impronta en su arquitectura, cada vez más deteriorada. El sitio es un espectacular mirador de la confluencia de los ríos Bellós y Cinca.
Después del almuerzo en Muro, hay que seguir ascendiendo, con precaución, porque el sendero es estrecho y el piso no ofrece muchas garantías. En el collado aprovechamos para disfrutar de la panorámica que se extiende en dirección al Pirineo teniendo como referencia el pueblo de Muro presidiendo la colina sobre la que se asienta y detrás las altas cumbres del Pirineo. Estamos en un cruce de caminos. Tomamos el PR HU-40 hacia San Vicente y dejamos a la derecha el PR HU-185 que se dirige a Morillo de San Pietro.
Bajamos por un camino transitado regularmente por ganado lanar y, con seguridad, por más de una manada de jabalíes. Es una senda bonita, entre robles, encinas, bojes, enebros, romeros…, hasta cruzar el barranco de los Moros, lugar fresco y húmedo.
Ascendiendo, en unos minutos vemos un cambio en la vegetación, transitamos ahora por un espeso bosque de pinos hasta llegar a un amplio collado a 1.020 metros de altitud donde nos agrupamos y observamos de nuevo Peña Montañesa, que nos enseña nuevamente su majestuosidad.
Hacia el Sur vemos la zona de San Vicente de Labuerda a donde nos dirigimos. Pasamos por una zona con curiosas formaciones rocosas y nos detenemos unos minutos en la zona de Casa Fontanal, hermoso ejemplo de casa fuerte, con torre defensiva.
Continuamos el trayecto por el viejo camino de herradura que llevamos transitando toda la mañana. Pasamos al lado de varias badinas y cruzamos el barranco de la Sierra. Aparecen unos campos de labor y en pocos minutos llegamos a San Vicente (780 m). Nos dirigimos a la iglesia donde nos espera nuestra amiga Dora que tiene la amabilidad de abrirnos las puertas del lugar.
El conjunto formado por la Iglesia de San Vicente Mártir, la casa abacial y el esconjuradero se levanta aislado y alejado del núcleo. La entrada a este recinto se realiza a través del esconjuradero ]que permite acceder a la iglesia, obra románica del siglo XII con posteriores intervenciones en el siglo XV y XVIII. Dentro del edificio contemplanos el interesante retablo dedicado a San Vicente.
Vamos un poco justos de tiempo y cruzamos el pueblo de San Vicente por la calle principal, admirando Casa Buil donde destaca la torre con aspilleras y una espléndida ventana geminada. Marchamos por el camino viejo para evitar el tránsito por la carretera, la tenemos que cruzar en un tramo para tomar de nuevo la senda para salvar la última subida. El último kilómetro es inevitable hacerlo por asfalto. Al llegar a Labuerda tomamos una pista cementada a la derecha construida hace pocos meses pues el paso anterior fue arrastrado por las lluvias.
Cruzamos el puente, callejeamos hasta pasar por la plaza de la iglesia y llegamos a nuestro destino. En Casa Turmo, Amparo y su equipo nos ofrecieron un sabroso menú. De allí salimos para montar en los autobuses y emprender el regreso a Huesca. Quedamos para el día 8 de diciembre; nos acercaremos a la comarca de La Litera para desde Camporrells pasar por la ermita de Los Mártires y terminar la marcha y los recorridos del 2013 en la población de Baldellou.
Longitud: 11 Km.
Desnivel: Subida: 450 m. Bajada: 400 m.