Travesía 158 – Chemin de la Mature (Francia)

Un viaje por el país vecino

La salida 158 transitó por el impresionante Chemin de la Mature

El pasado Domingo, a las 7,30 de la mañana salimos desde Huesca 64 senderistas para realizar la excursión nº 158 de Rutas por la Provincia de Peña Guara. En los autobuses, guiados por Ezequiel y Ramón, nos acercamos a través del túnel del Somport hasta el Valle del Aspe en el Pirineo Francés.

Dejando atrás el pueblo de Urdós y más abajo, a la derecha, el Fuerte de Portalet llegamos al aparcamiento de Pont de Cébers (637m de altitud) desde donde iniciamos la marcha con la previsión de disfrutar de un día despejado y una agradable temperatura. Desde aquí y tras caminar unos cientos de metros por una pista asfaltada llegamos al comienzo de la senda. En pocos minutos, después de ganar altura por un camino entre prados nos adentramos en la zona excavada en la pared rocosa de la montaña, a 150 metros sobre el barranco.

Esta senda de alrededor de un kilómetro discurre en continuo ascenso por encima de las gorgas del acantilado llamado del Infierno. La senda tiene entre dos y cuatro metros de ancho y fue excavada en el siglo XVIII con la finalidad de transportar los troncos con los que hacer mástiles para la armada francesa. Desde aquí pudimos contemplar el Fuerte de Portalet en todo su esplendor. Fue construido en el siglo XIX por los franceses para proteger la frontera y el valle del Aspe de una posible invasión española. Durante el camino nos encontramos con varios anclajes y algunos escaladores haciendo uso de las vías que ascienden desde el barranco y continúan hacia arriba decenas de metros.

Tras pasar los tramos más aéreos, la pendiente va perdiendo fuerza, el camino se ensancha y el paisaje va cambiando, haciéndose boscoso, por lo que decidimos que era el lugar idóneo para almorzar. Con las pilas cargadas emprendemos de nuevo la marcha. Esta vez la senda discurre por un bosque de hayas en el cual y casi ocultas nos encontramos dos cabañas, las granjas de Perry. Dejándolas a nuestra izquierda seguimos por una senda cómoda y mullida, entre avellanos, robles y hayas hasta llegar a la señalización donde un cartel indicador nos señala dos posibilidades, un camino descendente a la derecha que baja hasta un puente que cruza el río, y el otro ascendente a la izquierda que se dirige al Col d’Arras. Cogimos el primero por donde tras esquivar algunos arboles caídos llegamos al Pont de Trangas.

En este punto, peligroso porque el puente se encuentra en malas condiciones, decidimos darnos la vuelta ya que el tiempo iba ajustado. Regresamos por el mismo camino dejando para otra ocasión el itinerario que nos llevaría por el nombrado col d’Arras al punto de comienzpo de la marcha. De este modo, pudimos apreciar mejor las enormes paredes verticales en las que se encuentra el paso. Tras dos horas de continuo y pedregoso descenso llegamos hasta los autocares donde detrás de un cercado se nos acercan varios burros y algún caballo que posan para servirnos de fondo en las últimas fotografías.

Cruzando de nuevo el túnel del Somport nos dirigimos al albergue-refugio de la Sargantana, en Canfranc pueblo, donde pudimos recobrar fuerzas y comentar la excursión.

Sobre las 7 de la tarde ya estábamos en Huesca, quedando para la próxima salida de Rutas que será el 10 de noviembre para recorrer un bonito trayecto montañoso que separa las localidades de Escalona y Labuerda.