15-I-2017
Por el “Camino del Solano”
Comienzo de temporada con un recorrido circular por el entorno de los Mallos de Riglos
P. A.
Pasaron las jornadas festivas de la Navidad. Y los kilos acumulados hay que intentar eliminarlos. Es hora de comenzar las caminatas de “Rutas por la Provincia”. Soñar, vivir experiencias y compartirlas es uno de los objetivos de esta sección deportiva. El pasado domingo unos 60 senderistas se dieron cita en el lugar de costumbre para subir a los autobuses, conducidos en esta ocasión por Joaquín y Mariano.
El tiempo televisivo nos hablaba de un frío intenso y posibilidades de alguna borrasca en las sierras pre-pirenaicas a donde nos dirigíamos. Y así parecía ser mientras observábamos tras los cristales del bus las nubes que merodeaban la zona de los mallos. Tras 45 minutos de viaje paramos en el aparcamiento que se encuentra en la entrada de la localidad de Riglos (720 m.s.n.m.).
Efectivamente, a esa hora de la mañana el ambiente era gélido. Tenemos frente a nosotros la impresionante visión del mallo Pisón. En pocos minutos ya estamos bien abrigados y con la mochila a la espalda comenzamos la marcha, atravesamos el pueblo y en pocos minutos llegamos a un poste indicador que señala “Camino del Solano”. Lo tomamos y comenzamos la ascensión por una estrecha senda protegida por bojes, romeros y aliagas.
El colorido grupo continúa la ascensión ganando altura en cada una de las curvas de la ladera. El fresco de la mañana y el ritmo pausado y constante de la marcha hace que, en pocos minutos, vayamos observando cómo las impresionantes paredes de conglomerado van quedando debajo de nosotros. Alcanzamos una vaguada y llegamos a un señalizado cruce de caminos. Dejamos a la izquierda el denominado “Camino del Cielo” que recorre por la parte trasera del Mallo Colorado y giramos a la derecha para coronar un collado que se encuentra encima del mallo Chinchín; sopla el viento de forma violenta, avanzamos un centenar de metros hasta alcanzar un resguardo entre piedras calizas y arbustos donde nos detenemos un buen rato para almorzar protegidos.
Tenemos a la vista una extensa panorámica al sur de la Hoya de Huesca y el pantano de Tormos y al frente el castillo de Marcuello, la peña Don Justo y Os Fils, por cuya base pasamos en una de las excursiones del pasado año.
De nuevo en camino recorriendo la bonita senda del Solano entre afloramientos de piedra caliza, carrascas y bojes hasta observar un gran ventanal que la erosión ha moldeado en la roca. Nos detenemos en una especie de balconada encima del Paredón de los Buitres para hacernos una foto de grupo. En pocos minutos vamos a enlazar con la pista que se dirige a las Articas. Hacemos un intento de alcanzar el collado (1.220 m.) desde donde se contempla en los días despejados gran parte del Pirineo. Tendremos que volver en otra ocasión porque la zona norte está cubierta de nubes y el viento que sopla este lugar nos hace desandar.
Hacemos un pequeño descanso en el collado de Santo Román, donde bifurcan los caminos GR-95, por el que bajamos, el GR-1 y el Camino Natural de la Hoya de Huesca que continúa hasta Riglos. Seguimos por este último por una senda que baja hasta alcanzar el barranco de La Mota donde se convierte en pista al llegar al desvío de la Fuente de los Clérigos.
Ya en la pista, por la que circula canalizada el agua de la nombrada fuente, en continuo descenso enfilamos hacia la parte final de la marcha, al tiempo que vamos observando a nuestra derecha los distintos mallos que sobresalen en la ladera, todos con sus nombres correspondientes, unos recuerdan las casas de familias antiguas de la población, otros se denominan por sus formas y colores, otros sirven de homenaje a antiguos escaladores.
Pasadas la 1 de la tarde llegamos al destino cerrando el circuito del Camino del Solano. Hemos recorrido 10’800 km, un desnivel de 530 m y caminado de 4’30 h. Nos quedan unos minutos para visitar el pueblo de Riglos, observar una cordada de escaladores en el Pisón y tomar un refresco antes de subir a los autobuses. Nos esperan en Plasencia del Monte los amigos del Restaurante El Cobertizo que han preparado un variado menú.
Un buen rato de tertulia y en pocos minutos nos despedimos en Huesca hasta el próximo mes. La travesía del día 12 de febrero será por la Comarca de los Monegros, saliendo de Marcén, acabando en Alberuela de Tubo y visitando a lo largo de la caminata los enigmáticos torrollones de La Gabarda. Recordar que el próximo domingo la sección de Turismo por el Altoaragón tiene prevista una interesante salida: Paniello – Grustán – Graus.