Rutas por la Provincia realizó la última salida del año, antes del paréntesis navideño, por el tramo del camino natural de la Hoya que se inicia en la localidad de Agüero.
Salimos antes de salir el sol, con cielos muy nubosos y previsiones de lluvia. Una ligera llovizna acompañó nuestro viaje hasta el inicio de la marcha. En Ayerbe cedimos el paso al canfranero que iba a tope de velocidad y pasajeros.
En Agüero, al bajar del bus, seguía la lluvia. Una vez preparados para capear el mal tiempo iniciamos la marcha por sus empinadas calles hasta llegar a una fuente en las afueras. Búsqueda del camino porque el de la fuente llega… a la fuente.
Breve trepada hasta alcanzar la pista verdadera que pronto se convierte en carretera. Unos 150 m. más adelante aparece el desvío del camino que debíamos seguir, ya en descenso.
A poca distancia, por n campo de almendros, giramos a la derecha para encontrar la senda que habría de llevarnos hasta nuestro primer objetivo: la iglesia/ermita de Santiago que ya asoma entre los pinos.
La senda atraviesa unos yermos y campos hasta alcanzar el pinar. Este tramo estaba algo embarrado y por ello complicado. Y la lluvia seguía…
Ante nosotros la inacabada iglesia. Edificados los ábsides y el crucero, del s. XII. No está claro cual fue la causa de la paralización de las obras, quizá por dificultades económicas…
Al momento llegó el encargado de abrir la ermita para contemplarla en su interior. Lástima que por ser un día oscuro y carecer de luz en su interior poco se pudo apreciar pero es de agradecer el interés para mostrar este recinto. Pedro nos explicó algunas teorías sobre este monumento inacabado.
Y llegó la hora del almuerzo, pasado por agua. Algunos refugiados en la iglesia, otros bajo los pinos, otros a más altura… Y en pie para no mojarse.
Un café bien caliente para entonarse. Y si estuviera demasiado caliente se añade algo para rebajarle la temperatura, que no los grados.
Terminado el ágape vuelta a la ruta. A desandar el camino embarrado hasta llegar nuevamente a la pista que sigue bajando en línea recta. A veces se abandona para seguir los antiguos caminos que presentan tramos empedrados y bordeados de coscojas.
Más adelante el camino se transforma en seda y pronto alcanzamos a ver el pueblo de Murillo. Aquí la lluvia cesa pero no despeja.
Cuando nos acercamos al pueblo encontramos a otros senderistas de Zaragoza (Torres de B.) que hacían travesía inversa.
Antes de entrar en Murillo paramos en la fuente para hacer una foto del grupo y descansar unos minutos. Continuamos por sus calles hasta cruzar la carretera para dirigirnos hacia la pasarela del Gállego.
Pronto la alcanzamos y cruzamos sobre el río que baja muy caudaloso.
Una vez terminada toda la bajada viene toda la subida. Y salta a la vista, desde el río, toda la subida. Pero como está bien acondicionada, con barandillas y escalones, se llevó bien. Además así dio tiempo a contemplar el bonito paisaje: Murillo, Peña Rueba, el río, los Mallos… La lluvia vuelve sobre nuestros pasos, o sobre los paraguas.
Poco a poco íbamos llegando a nuestro destino pero antes, al atravesar la vía del canfranero, hubo foto sobre las traviesas. Como no venía el ave…
Seguimos la pista que lleva a Riglos que sube de forma continuada. Posibilidad de contemplar, en primer plano, los Mallos. No era día de escalada. No vimos colgados. Bueno, uno sí.
Como íbamos bien de tiempo nos dimos media hora para recorrer el pueblo. Hacia las dos salimos hacia Plasencia donde, en el Rest. El Cobertizo, teníamos la comida final del año. Muy bien atendidos y satisfechos, por cierto.
Con esta ruta se cierra el 2014. Habréis recibido el programa de las marchas para el año 2015. Esperamos contar con todos/todas el próximo año en nuevas Rutas por la Provincia. Feliz Año