23 febrero 2020
Primavera en febrero.
Peña Guara estrena con esta salida el programa Travesías Pirenaicas, un programa indicado para los que gustan de practicar montañismo a lo largo de todo el año de una forma amena y con actividades al alcance del montañero aficionado medio. La primera salida de este programa consistió en una ascensión invernal al pico Acué. El pico Acué, de 2258 metros de altura se sitúa en la línea fronteriza francoespañola cerca del ibón de Estanés, en una línea de picos de inferior altura que la línea paralela de picos más al sur que va desde el pico de Aspe hasta el Bisaurín.
La idea era hacer una ruta clásica de subida desde el parking de Espelunguère, al que se llega desde la boca norte del túnel de Somport y tomando al poco de salir un desvío que va a las Forges d’Abel y desde el que cogemos una estrecha carretera que va a la central eléctrica d’Estaens y que continúa hasta dicho parking, al que llegamos con un autobús de 35 plazas, felicitaciones al conductor por su pericia.
La ruta comienza subiendo desde el parking, en torno a los 1300 m. de altura, por el bosque de Espelunguère, menos frondoso que en verano por la falta de hojas en los árboles, hasta el Col du Plâtre a 1620 m. de altura, donde se acaba el bosque y llega la zona de prados y alta montaña. En esta zona aparecen pistas usadas por los ganaderos y se ve al fondo la Cabane d’Atsout donde se elaboran quesos artesanales durante el verano y por donde va el sendero que se dirige al refugio de Arlet. Nosotros la dejamos a la derecha y seguimos por el valle que se dirige al collado de Acué, pasando por la Cabane Caillabère donde hacemos una parada para tomar algo. Al poco de dicha cabaña llegamos a la cota de nieve, y dado que está muy compactada por la falta de nevadas recientes y las altas temperaturas diurnas, nos vemos obligados a poner crampones hasta la cumbre.
Subimos por las palas de nieve dura hasta el collado de Acué o col de la Contende (2020 m.) y desde allí subimos a un pequeño valle colgado que da acceso a la cresta que acaba en el pico Acué. La cresta final es empinada, pero la nieve allí es escasa y no especialmente peligrosa con el material que usábamos. Llegamos al pico Acué en unas condiciones propias de un mes de junio, estando en la cumbre al sol sin necesidad de ropa de abrigo y con paisajes excepcionales.
Las altas temperaturas de las últimas semanas habían dejado las caras sur de las montañas sin nieve y con la vegetación casi en floración, mientras las caras norte o más protegidas aún conservaban una buena cantidad de nieve. La bajada por el mismo itinerario y muy divertida por la nieve reblandecida que amortiguaba la pisada. Un día muy agradable para el comienzo de este nuevo programa de Peña Guara, esperemos sea presagio de muchos otros buenos momentos.